RADIOS COMPAÑERAS

jueves, 6 de diciembre de 2012

LA VOZ DE UNA MADRE


UNA CARTA

En estos días en los que en el Tribunal Oral Federal de Santa Fe  por segunda vez se juzga en el país las violaciones sexuales como delitos de lesa humanidad,  hace dos años bajo el título que sigue fue publicada una carta en el Correo de lectores del diario Tiempo Argentino de Buenos Aires y firmada por Luisa Pratto, reclamando por la demora de Justicia en una situación difícil y compleja que le tocó vivir con su hijo. Esa causa tiene que ver con la sustitución de identidad de un niño en el año 1977 y será llevada a juicio oral por el Tribunal a mediados del año 2013. Y no es parte de la actual Causa Sambuelli debido y suponemos, entre otras cosas, a la aparición de situaciones “intrusas” con palos en la rueda que sin muchos fundamentos pretenden favorecer el lado de la apropiación y a los imputados Comodoro Danilo Sambuelli y otros que Luisa cita en su texto. Para “no enredar el partido se separó la cancha” y aspiramos a que cuando corresponda haya luz sobre aquel truculento suceso de la dictadura militar en Reconquista.
Luisa Pratto se presentó junto a su hermana Griselda en la Justicia Federal de Reconquista en el año 2008, acompañadas por la Asociación Norte Amplio por los Derechos Humanos, para contar sus duras historias que permanecían ocultas para la sociedad, entre ellas ésta del niño.
Lo que sigue es el escrito de una mujer que busca también cerrar un capítulo de su vida. El inicio el 19 de noviembre de una de las causas que investiga la represión en el norte santafesino es una buena señal para que Luisa pueda colmar su pedido de Justicia.

Causa n° 050 de lesa humanidad

Por:
Luisa Beatríz Pratto

Hola a todos. Quiero aprovechar la oportunidad que me brinda este medio para elevar mi queja a quien corresponda, a raíz de lo que sucede en la provincia de Santa Fe, en la ciudad de Reconquista más precisamente. Es la causa N° 050 reiniciada a fines de 2008 correspondiente a delitos contra los Derechos Humanos cometidos en la pasada dictadura cívico-militar. Todavía estamos dando vueltas para juzgar a los implicados en la sustracción de uno de mis hijos y los vejámenes sufridos por mis entonces otros dos hijos menores (nueve meses y dos años y medio). Aclaro que no estuve en ningún centro de detención pero sí fui violada, ultrajada, torturada delante de mis pequeños en mi propia casa, por estos señores que siempre parece ser tienen la complicidad de civiles, jueces, fiscales, medios y vaya a saber qué más hasta el día de hoy. Gracias a Dios pude encontrar y recuperar a mi hijo, que me fue sustraído en el Sanatorio Reconquista, el 26 de marzo de 1977, por Gladys Nashaski de Martino y la apropiadora Cecilia Góngora de Segretín, con ADN positivo hecho en el Hospital Durand el 23 de abril de 2009. Todavía la causa vaga de un lugar a otro (oficinas, juzgados y ciudades como Corrientes, Santa Fe, etc.), sin respuestas, ya que todavía no podemos darle su verdadera identidad. Van 33 años. ¿Cuánto más vamos a tener que esperar? ¿Me alcanzará la vida? Con tantos golpes, tanto sufrimiento. Si alguien puede hacer algo para terminar con la corrupción que hay en el sistema judicial santafesino, bienvenido sea. Siempre es la misma historia: los asesinos verdaderos andan como señores y nadie da respuesta. Espero que esta vez no sea como las anteriores y no me cajoneen la causa: porque, por Dios, quién me devuelve tantos años de angustia y perjuicios, de daños físicos, psíquicos. ¡Por favor! Tengo 58 años, soy una madre que sólo pide justicia y que, por favor, pueda iniciarse el juicio. Muchas gracias y espero respuestas

(Publicada en el diario Tiempo Argentino el 5/11/10)
Tribunal Oral Federal de Santa Fe