Escuelas técnicas:
CELEBRANDO LO
AVANZADO
Sobran
motivos para festejar el Día de la
Educación Técnica .Y decimos celebrar porque han quedado atrás los años 90,
donde políticas neoliberales le han
hecho mucho daño a esta modalidad de aprendizaje. Esa etapa, en la cual, se aplicaron
medidas para destruir la educación pública, no fue un accidente de la historia:
fue un proyecto político de país, que prescindió de la industria nacional y
priorizó las importaciones, impulsado por el libre mercado. Y fíjense hasta que
punto, que se llegó a importar técnicos de países vecinos.
Las
consecuencias se hicieron visibles a corto plazo con un 23% de desocupados, el quiebre de miles industrias,
y 50% de la población viviendo bajo la línea de pobreza.
A
partir del 2003 con el gobierno de Néstor Kirchner, comienza un nuevo proceso,
con el cual podemos estar de acuerdo o no, pero
es innegable el esfuerzo del gobierno nacional de reparar e impulsar la
educación técnica.
Con
medidas concretas que van del desde una nueva
Ley nacional de Educación
Técnica, hasta el aumento del
presupuestos educativos. Situación ésta última que se visibiliza con
equipamientos que van desde bibliografía, hasta máquinas herramientas,
financiadas por la Nación, por intermedio de
los Planes de Mejoras del INET (Instituto de Nacional de Educación
Tecnológica).
A
todo esto debemos sumarles la creación de un Ministerio de Ciencia y
Tecnología, lo que permitió repatriar científicos y profesionales que se habían
ido en décadas pasadas. Y por último la puesta en escena de una mega muestra de
ciencia y tecnología como Tecnópolis.
Tal
vez estas medidas pueden ser consideradas insuficientes, pero
nadie puede ignorar hoy la importancia estratégica y a la vez inmediata que
tiene la formación de técnicos para el aparato productivo, para el desarrollo
social y para atacar la desocupación.
Esto
no es un hecho aislado sino que responde a un proyecto de país basado en la
recuperación de nuestra querida industria nacional, para la inclusión de miles
de argentinos al mercado laboral.
Falta
mucho por recorrer y hacer, está en
nosotros, los actores sociales, asumir
el compromiso de profundizar un modelo con más inclusión, equidad y
dejarnos de intereses mezquinos.
Prof. Pablo Rolon
Escuela Técnica- Yapeyú- Reconquista