Entonces
Israel considera que la cuestión del Holocausto estaba en un momento perdiendo
rating, que la comunidad internacional necesitaba un coscorrón, y con el
respaldo de su Primer Ministro, aprovechando una visita oficial a un gobierno
constitucional, opera clandestinamente en la Argentina violando el Derecho
Internacional en general y la soberanía del pueblo argentino en particular,
porque este pueblo tiene memoria muelle y hay que sacudirlo de vez en cuando. Y
ahora resulta que exigen al Gobierno Nacional y Popular justicia y verdad, no
como reos de haberla arruinado premeditada y oficialmente, sino como sus
paladines y defensores universales. Quieren verdad? Esta es la verdad.
Carlos Echegoy Z.