RADIOS COMPAÑERAS

sábado, 5 de diciembre de 2015

LA HORA DEL PUEBLO



CARTA A LA PRESIDENTA

Sra. Presidente

De la República Argentina

Cristina Fernández de Kirchner


De mi mayor consideración


En su último discurso, como tantas veces impecable y justo, advertí el reconocimiento implícito de la licitud del triunfo de Cambiemos en el Ballotage del 22 de Noviembre. No por la exigua diferencia de sufragios entre las fuerzas que compitieran ese día para regir los destinos de la Nación Argentina podría yo disentir con Usted. Espero convercerla sí con argumentos que le hacen a Usted justicia y a su Gobierno. No la abrumaré aún con el análisis de los acontecimientos y antecedentes que creo fundamentan con razonabilidad irrefutable y objetiva mi denuncia, a la vez gravísima y gravitante que compartí a los compañeros del Frente para la Victoria por los medios que pude, que cuando menos son insuficientes absolutamente. Los adjunto al final de esta carta para que los considere Usted. Estoy seguro que habrá de compartir su lógica y aún sus conclusiones aunque prefiera desestimarlos por la razón que fuere, y con la que no podría no acordar aunque disintiera todavía y siempre.



Estos meses fueron Señora Presidente de desembozada violencia, y vuestro pueblo sometido a un terrorismo mediático que puede sin excesos calificarse de beligerante, un despliegue que yo juzgo criminal sin temer excederme en su calificación: la presión destituyente que el arco opositor, los medios hegemónicos, dirigentes políticos y sindicales, el empresariado concentrado, sectores de la Justicia vinculados al Terrorismo de Estado, el peronismo antikirchnerista que finalmente confluyen y precipitan en Cambiemos para conformar la recreación de aquella Unión Democrática cuya perseverancia no menos criminal terminó derrocando al Presidente Juan Domingo Perón.



Aún nosotros escuchamos el rumor de aquellos aparatos que surcaban el cielo argentino para descargar sus bombas sobre cientos de ciudadanos que nada más caminaban, hombres, mujeres, ancianos y niños: niños! Sí, aquel setiembre de 1955 la sangre de los niños corría por las calles, simplemente, como sangre de niños. Lo demás fue muerte y solo muerte.



La evocación de esos días de horror no es ilícita: son los mismos, Señora Presidente, son los mismos: la misma impudicia, el mismo salvajismo, la misma violencia, el mismo desprecio por los vulnerables, por los más.



Se le ha llamado a Usted como a Evita en su momento, el discurso que anónimo y brutal, soez y siniestro, que por la red circulaba y aún circula como los mil sinuosos cuerpos coronados por espantables cabezas indecentes es una objetiva e irrefutable prueba Señora Presidente: son los mismos.



Acompañamos al Gobierno Nacional y Popular y su proyecto porque al fin, al fin, vislumbramos luego de tanta muerte y tristeza y desamparo del pueblo argentino un fulgor, no importa qué tenue, no importa qué incipiente todavía, que daba sentido a esa vulnerabilidad sufrida por decenios por muchedumbres de muerte heridas tantas veces y tantas veces oprimidas. Entonces comenzaron.



Se reunieron y pensaron y escribieron; conversaron y acordaron; y estaba todo preparado, ya era nada más cuestión de tiempo y oportunidad. El 11 de Marzo de 2008 a raíz de la sanción de la ley de retenciones móviles el arco opositor desencadena contra el Gobierno Nacional y Popular y el pueblo argentino condiciones de beligerancia interna: se cortan las vías de comunicación nacionales y provinciales, se aíslan ciudades, comunas y parajes, se desabastece al pueblo argentino de insumos de primera necesidad, agua, alimentos y medicamentos. Señora Presidente, no se registra en la Historia reciente de nuestra Patria una acción criminal y sediciosa de esta envergadura, amplitud y continuidad en el tiempo. Todos los actores involucrados en este criminal despliegue, todos, sin excepción, son componentes de la descomposición política Cambiemos.



Usted Señora y nuestro Gobierno fueron sometidos al asedio perseverante de un terrorismo mediático para el que no hay otro calificativo que el de infame. Infamia y descomposición, infamia y violencia, mentira, descomposición e infamia. Infamia.



Usted, su malogrado esposo, nuestro Gobierno, nosotros, éramos autoritarios, antidemocráticos, violentos. Tan palmaria y transparente es la evidencia Señora Presidente, que argumentar en nuestro favor y exponer quiénes son los violentos, autoritarios y antidemocráticos sería burla a la razón, superflua labor, desprecio de la inteligencia.



En la madrugada del 23 de noviembre comencé a escribir LA HORA DEL PUEBLO que le comparto a Usted por tres razones.



Porque acaso no sea tarde aún para formalizar ante la Justicia Electoral, y oficialmente, una protesta respecto a un proceso fraudulento de nuevo tipo que tuvo por objeto y logró desplazar un Gobierno y quebrar la posibilidad de su continuidad.



Porque denuncia con meridiana claridad y objetivamente quiénes, desde qué momento y con cuáles procedimientos desencadenaron una campaña del miedo y ejecutaron sobre el pueblo argentino un terrorismo de la incertidumbre desde el dominio de los medios masivos de comunicación.



Porque es mi responsabilidad comunicar a los Poderes de la República y a los ciudadanos de la Patria que de ninguna manera cederé mi representación a quienes mediante procesos reñidos absolutamente con la Democracia burlaron la soberana voluntad de los argentinos y usurparon su Gobierno.



Espero lleguen a Usted estas reflexiones, en tanto reciba mis saludos y admiración, siempre.





Carlos Alberto Echegoy

DNI 10.560.795

En Reconquista, Provincia Invencible de Santa Fe, a los veintisiete días del mes de noviembre del año dos mil quince.





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LA HORA DEL PUEBLO



1

El Gobierno Nacional y Popular fue objeto de una planificada y metódica presión destituyente; el objetivo de máxima era derrocar el Gobierno ; en su defecto, esto fue de dominio público y exigido implícitamente por los actores políticos nucleados en Cambiemos obligar al Gobierno a convocar a elecciones anticipadas. El objetivo que podríamos llamar permanente dirigía sus expectativas a un desgaste a largo plazo mediante una estrategia mediática de desprestigio y generación de una opinión pública adversa. Esto fue en verdad decisivo, gran parte de la población reprochaba al Gobierno previamente a las Paso y más intensamente en las semanas previas al ballotage, ser autoritario, no promover el diálogo, irrespetuoso de la división de Poderes, etc. El tratamiento a la Presidente de la Nación llegó a desbordar el apego a ninguna forma de tratamiento normal y respeto mínimo de la investidura. Los medios de comunicación y los staff periodísticos desplegaban con una impunidad que merece ser examinada con mayor detalle, el desprecio más burdo y grosero y ruin de todos los tiempos en la historia política de la Argentina, sólo comparable al que se prodigara al peronismo previamente y luego a septiembre de 1955. El examen dejará expuesto qué periodismo padeció el pueblo argentino en el período.Por el momento veamos de qué manera republicana y democrática y con qué apego a las leyes se desempeñó la oposición que luego confluye en Cambiemos en el período.



2



ANTECEDENTES DESTITUYENTES



11 de Marzo- 18 de Julio de 2008

A raíz de la sanción de la Ley de retenciones móviles: la oligarquía y la burguesía y el arco opositor incluida la izquierda y el peronismo disidente o antikirchnerista, generan condiciones de beligerancia interna, cortan las vías de comunicación nacionales y provinciales y desabastecen al pueblo argentino. El Gobierno Nacional y Popular resiste la embestida, la neutraliza y finalmente recupera el control y la iniciativa política.





18 de Enero – Junio de 2015



A raíz de la muerte del Fiscal Nisman, los mismos actores desencadenan una campaña de desprestigio del Gobierno a nivel nacional e internacional, esta vez con apoyo explícito y activo del Imperialismo. La ofensiva se diluye a medida que las investigaciones exponen una maniobra que involucra a la SI, y diseñan y controlan el Mosad y la CIA. En este conflicto se manifiestan sectores de la Justicia seriamente comprometidos con el Terrorismo de Estado y la Dictadura genocida.





17 de Setiembre de 2015



A raíz de las elecciones en la Provincia de Tucumán los mismos actores despliegan la tercera ofensiva destituyente. El objetivo es desgastar al Gobierno, revertir la posible derrota electoral de Octubre y condicionar la transición

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El Gobierno Nacional y popular fue objeto de un permanente asedio y violencia institucional por el descompuesto político Cambiemos.

Aún hoy los honestos y patriotas productores agropecuarios conservan en silos bolsa una producción que esperan comercializar a mejores precios con la suba del dólar que les prometiera Macri.



Consultado por los periodistas el célebre Horacio Cavallo manifestó: ahora al país le irá mejor.



Una información actualizada revela el comportamiento del empresariado y comerciantes para con el pueblo argentino, que se presume votaran masivamente a Cambiemos. Los comunicadores de los medios hegemónico, compungidos y preocupados, demandan mesura al sector por un aumentos de los precios, alimentos, ropa, automóviles, electrodomésticos, combinados con su retención especulativa.



3

FRAUDE Y USURPACIÓN



Se comparte aquí las estrategias de los sectores e intereses que componen Cambiemos para concretar un fraude de nuevo tipo y quebrar la continuidad del Movimiento Nacional y Popular y su Proyecto inclusivo y reparador de los derechos económicos, sociales, políticos y culturales del pueblo argentino.



La tesis que aquí se fundamenta y expone advierte del proceso fraudulento que el 22 de noviembre culminó con el desplazamiento de un Gobierno legítimo y propone la reconsideración de los resultados del ballotaje a la luz de estas evidencias;

o en su defecto estimular en el pueblo una conciencia movilizada que en absoluto legitime jamás el despojo de su soberana voluntad para implantar un modelo regresivo y anti popular en nuestra amada Patria, endeudarla, someterla a los designios del Imperialismo, hundirla en la abyección y la indignidad, utilizarla como ariete para dar un golpe definitivo a las democracias populistas de la Patria Grande, dilapidar el enorme esfuerzo de un pueblo que cuando se levanta y camina ofende esos intereses de los poderosos, vinculados desde siempre al Capital extranjero con el que se combina para postrarlo, y así postrado, explotarlo con minuciosa ferocidad.



Como si el pueblo argentino fuese para ellos nada más que una fuerza de trabajo a la que se le concediera graciosamente el “privilegio” de reproducirse para garantizarse eternamente hombres y mujeres para enriquecerse con su perpetuo sufrimiento: no ciudadano sujetos de Derecho, sino informe rebaño al que pudiera incluso despojarle llegado el caso de su condición humana.



La derrota de Aníbal Fernández en la Provincia de Buenos Aires, que el peronismo antikirchnerista entregó a Cambiemos en una decisión política para la que cualquier calificativo es inapropiado por todo lo que involucra de devastador para el pueblo en general y para el pueblo peronista en particular, abrieron una segunda etapa del proceso fraudulento.



Los medios hegemónicos desplegaron una ofensiva cuyo objeto fue instalar en el pueblo un hastío que muy lejos estaba de experimentar por su Gobierno. Compañeros, reflexionen de este modo: si ese despliegue se hubiese dirigido a sostener el gobierno y no a erosionarlo, cuál hubiese sido el resultado de esa prédica? Lo que quiero significar es que los medios hegemónicos contribuyeron por un lado a generar exasperación, zozobra e incertidumbre respecto al FPV como a dar por descontado el triunfo de Cambiemos.


En los días inmediatamente previos a la compulsa la Justicia emitió fallos que revocaban otros, que subrayaban una y otra vez los periodistas, estaban dirigidos a desmontar una Justicia adicta al kirchnerismo. La resurrección del caso Nisman, la sediciosa y desembozada prédica de responsabilizar a la Presidente de la derrota de Buenos Aires, el asedio a los jóvenes militantes de La Cámpora con cualquier pretexto, elucubración, editoriales radiales, televisivos, gráficos, configuraron un alud premeditado, planificado, desencadenado para hundir al pueblo en el terrorismo de la incertidumbre.



Fue criminal. Fue un magnicidio mediático desencadenado sobre un pueblo inerme y desguarnecido: así comenzó el acto final del proceso fraudulento que culminó con el triunfo de Cambiemos.



Así, en este clima de hostilidad permanente, de permanente asedio, de ignominia aviesamente perpetrada fue a votar el dignísimo pueblo convocado por el Proyecto Nacional y el dignísimo peronismo en el que flameaban desde el fondo de su historia coronada de glorias ancestrales banderas de descamisados y cabecitas negras de Perón y Evita.



Así fueron marchando, con el alma herida por las traiciones de unos y terrorismo de la incertidumbre implacablemente ejecutado hora por hora, día por día, semana tras semana por medios hegemónicos.



Y aún faltaba. Aún faltaba: en el colmo de su descomposición y de su abyección la indecencia desbordó anegando a esos hombres y mujeres que habrán de replantearse una profesión que el 22/11 redujeron a polvo y espanto.



A las 6 de la tarde en los canales televisivos, primero en uno, luego en otro, finalmente en todos, salvo, obviamente, el canal público, podía leerse en títulos catástrofe GANA MACRI.



GANA MACRI y todos los staff periodísticos, invitados, dirigentes, peronistas antikirchneristas, con frescura, cinismo y sin par desvergüenza intercambiaban comentarios, que ya sin pudor, ya sin recato, ya sin decencia, sí todo fue indecencia, descomposición y fraude en esas horas siniestras del boca de urna y los primeros cómputos.

Tarde en la noche, el fraude mostró la risa mueca de la infamia consumada.

Fallaron los boca de urna, dijo uno. Sí, y también las encuestas, dijo otro.

En la madrugada la diferencia era 2.92



La fiesta había terminado.



Comenzaba la hora del pueblo.