Memoria, Verdad y Justicia en el Norte Santafesino

martes, 21 de agosto de 2012

Hablemos claro


Frente Gremial “4 de Abril”:
En torno al caso Luis Gil
En los próximos días se conocerá la sentencia del juicio por amenazas a testigos y querellantes de causas de delitos de lesa humanidad en el norte provincial que se está llevando adelante en el Tribunal Oral de la ciudad de Santa Fe. Las amenazas, firmadas por “La Hermandad”, se realizaron vía e-mail y alcanzaron a diversas personas: militantes de DDHH, funcionarios judiciales ligados a la causa 050, docentes, etc. Por ello, y por tratarse del primer juicio por amenazas de este tipo en todo el país, los medios de comunicación le han dado cierta relevancia al tema. La cuestión que deseamos plantear es, justamente, la de las referencias que se realizan respecto del principal imputado en la causa, José Luis Gil: se trata de un policía retirado de la Guardia Rural “Los Pumas”, quien durante la última dictadura militar desplegó actividades en el centro de “Santa Felicia”, reconocido como centro clandestino de detención por varios ex-detenidos, además de desempeñarse en esos años como Personal Civil de Inteligencia del Ejército –según la lista que el mismo Ejército entregó en 2009 a la ministra de Defensa Nilda Garré–.
Pero el imputado, además, desarrolló actividades como docente en diversas escuelas secundarias de Reconquista. En esa función desplegó una práctica tan autoritaria como intimidadora. Muchos son los que recuerdan el miedo que producía cuando ingresaba a un curso, la manipulación de la conducta de los alumnos, abusos que rayaban en el delirio –como por ejemplo, el de sacar un arma y apoyarla en su escritorio mientras desarrollaba sus clases–, el acoso y maltrato a docentes que osaban contradecirlo. Varias fueron las denuncias realizadas, pero pocas las autoridades que tomaron medidas concretas. Finalmente, gracias a la valiente gestión de un grupo de compañeras comprometidas con la democracia y la justicia, Gil fue investigado, cesanteado y –hace unos años– exonerado por un decreto del entonces gobernador Hermes Binner.
Como Frente Gremial “4 de Abril” –Departamento General Obligado- queremos hacer una observación acerca de cómo algunos medios de comunicación referencian a este personaje nefasto de nuestro medio. Las constantes alusiones al mismo como “profesor Gil”, “docente Gil”, etc. no hacen más que colocarlo en un lugar simbólico y referencial para esta comunidad de Reconquista que no merece ni le corresponde, dado que fue exonerado de la tarea docente.
Entendemos por ello que la mención en referencia al imputado debiera ser como “policía rural”, “PCI”, “puma”, “represor”, etc., ya que son ellas las que le corresponden por el lugar y el papel que cumplió en nuestra sociedad y del cual jamás se arrepintió o desdijo, y desde el cual jamás tampoco colaboró con la Justicia en el esclarecimiento de los delitos de lesa humanidad que asolaron nuestro país y región en épocas oscuras.