Rosalía
Jara
FINAL DE CUENTAS
Todo lo que hacía presumir en el caso Rosalía Jara se ha cumplido tras la instancia de debate durante varios días. En el día de la fecha en los Tribunales de la policial ciudad de
Vera el acusado docente Juan Valdez
fue condenado a prisión perpetua por el asesinato de esta muchacha joven y de
condición humilde. Esta sentencia por parte de tres jueces repara en parte la memoria de la vida de la
jovencita (con mucha ausencia del Estado) y reivindica a los que en su
propio pueblo Fortín Olmos se animaron y sostuvieron la lucha por JUSTICIA PARA ROSALÍA. Muchas veces en soledad e incertidumbre.
De la misma manera es una reivindicación para los colectivos de mujeres que empujaron y
empujaron para que el carruaje de la VERDAD no se detenga o se desvíe. Alentando para que los acusadores (fiscal y querellantes) no le erren ni un centímetro.
FINAL DE CUENTAS. Una imagen x mil palabras: VALDEZ esposado y en el patrullero, mirando su destino de rejas y encierro (Foto: Mabel Fernández) |
Interrogantes
Valdez en su defensa hizo una “fuga hacia
adelante” acusando a la Policía y a la
Justicia. Él sabía que su destino estaba definido. Ahora… ¿Rompió un pacto
de silencio?... ¿se abrirá una investigación sobre la actuación policial en
Fortín Olmos durante toda la etapa pre y post a la desaparición de Rosalía?
¿Por qué el entonces jefe policial de la Comisaría III (Unidad Regional XIX)
fue ascendido en la responsabilidad de inspector de comisarías del norte del
Departamento Vera, sin estudiar la conducción regional-provincial su sospechosa
actuación en aquellos días?. Es el mismo oficial (Ivan Barrientos) que tiempo después será apresado acusado de
trabajar con la quiniela clandestina, en Reconquista.
¿Estuvo solo Valdez la noche del asesinato?...
Cabe acotar que éste conocía la zona de El Bonete, donde arrojó el cuerpo de la infortunada en una fría noche, ya que hizo reemplazos allí como docente en el Km 50. Como todo habitante de esa zona, conoce los caminos secundarios, por el Km 70.800, etc. que desembocan en la ruta nacional 98.
¿Hubo otros uniformados, además de los
nombrados en las audiencias, que le dieron una mano para encubrir el crimen?
¿Qué otras actividades relacionaban a
policías con Valdez en Fortín Olmos?
"No le tengo miedo a la Policía" desafió. ¿Y qué es eso de “complicidad de la Justicia”
que tiró sobre la mesa del Tribunal el victimario de Rosalía?. En momentos que el caso de
dos fiscales en Rosario escandalizan la credibilidad del Poder Judicial en el sur provincial.
Descifrar estos interrogantes que se plantean
será una buena oportunidad de advertir a otros servidores públicos que los pies
no se sacan fuera del plato de la ley con sucias complicidades. Y de tranquilizar la conciencia-confianza ciudadana, fundamentalmente en la Cuña Boscosa, conmocionada en estos tres años
por una muchachita asesinada y su hija atravesada por una brutal ausencia
materna después del crimen.
Ojalá podamos seguir creyendo, aún ante la repetición de otras crueldades de género, en que este tipo de hechos --hijos de prácticas culturales que cuestan erradicar--, se acaben para avanzar en el respeto a la dignidad humana.
Rosalía Jara, una historia como las de muchas (foto: red social Facebook) |