Diputado (MC) Jorge Dubulois |
Aldo Sotelo, Secretario General SITRAM (municipales de Reconquista) |
Además del cordón central policial, a ambos lados estaban los patas negras de choque. Sumado a efectivos en las dos esquinas de la calle |
Liberar las alegrías |
En
Tostado hubo mucho ruido. El compañero abogado Iván Bordón recuperó su libertad
este sábado luego de una extensa jornada vivida en los Tribunales de esa
ciudad, donde se realizó la audiencia imputativa presidida por la Dra Cristina
Fortunato. Tras tres días preso luego de ser golpeado, no prosperó nuevamente
el pedido de la fiscal Sonia Bustos y su eterna persecución a toda esta lucha
de los descalzos: Bordón vio la calle rodeado de abrazos y alegría.
El
operativo policial para rodear al lugar de la audiencia fue inmenso y
exagerado, incluido una unidad de bomberos para apagar incendios. Una
vergüenza.
Bancaron
a Bordón los abogados de HIJOS-Santa Fe Lucila Puyol y Guillermo Munné, además
del Dr. Rodrigo Chapero y los médicos Oscar Pellegrini y Roberto Smuck. Sumado al acompañamiento del presidente del Colegio de Abogados de Reconquista, Dr.
Aníbal Zupel.
Cerca de las 14, hora en que el estómago reclamaba, los cros. de Tostado llegaron con una gran olla de arroz con pollo para compartir ahí en la calle.
Fue una nueva jornada de lucha con miel de triunfo. No siempre ganan los poderosos… en ésta, como en las películas de cowboy que veíamos cuando éramos pibes, ganó “el mocito”.
El lobby sojero
perdió
“Gracias compañeros”, dijo ayer Iván Bordón apenas salió en libertad a
media tarde. Lo rodeaba una pequeña multitud de campesinos del norte,
militantes y luchadores contra la injusticia que esperó -desde las diez de la
mañana hasta las cinco de la tarde- el resultado de una audiencia imputativa en
el Ministerio Público de la Acusación, en Tostado. Era el alivio. El fin de una
pesadilla de dos días y tres noches que pasó preso por orden de la fiscal Sonia Bustos, quien lo imputó por
supuesta “resistencia a la autoridad” en un allanamiento a sus defendidos, los hermanos
Clavero, el miércoles pasado, desempolvó viejas causas por el mismo cargo y lo
acusó como jefe de una presunta “asociación ilícita”. La banda era la
organización de campesinos del norte de la provincia que resiste el despojo de
sus tierras y que logró la sanción de la ley 13.334 que frena los desalojos
compulsivos hasta 2020. A pesar del esfuerzo de Bustos y de dos querellantes
–que representan a empresarios de la tierra-, la jueza Cristina Fortunato rechazó el pedido de prisión preventiva, desestimó
la figura de “asociación ilícita” por falta de pruebas y ordenó la “inmediata
libertad” de Bordón. En la calle lo esperaban los abrazos. “Hemos desbaratado la maniobra”, festejaron los abogados de Hijos Lucila Puyol y Guillermo Munné.
Bordón
es un reconocido defensor de pequeños productores del norte desapoderados de
sus tierras. El miércoles estaba en Tostado cuando le avisaron del segundo
allanamiento a los Clavero, una de las familias que patrocina. Hace un año, Germán Clavero y sus sobrinos Abel y Roberto habían sido allanados a
punta de pistola en su campo, en Gato Colorado, y atormentados por la Guardia
Rural Los Pumas. Le prestaron una bicicleta y llegó hasta la casa. Dijo que era
el abogado, quiso ver la orden de allanamiento y trató de controlar la
legalidad del acto. Su quimera terminó con la cara aplastada en el suelo,
golpes en la nuca y detenido por orden de Bustos. El médico Roberto Schmuck constató las secuelas
de esa golpiza.
“Para justificar esa
situación de la supuesta resistencia a la autoridad de Bordón en el operativo
del miércoles, la fiscal Bustos desempolvó un montón de causas inactivas”, reveló Munné. Todas
por el mismo cargo, de 2015, 2016 y 2017. “Fue muy notorio que habían buscado
varios legajos para salvar lo que hicieron el miércoles, causas en las que no
se hizo nada durante mucho tiempo, donde no era necesaria ninguna privación de
libertad y en las que ahora había urgencia para detenerlo”. “Lo que quería Bustos era salvar lo que la
policía hizo el miércoles. Otro atropello”, explicó.
En
los procedimientos que violan la ley 13.334 que frena los desalojos de predios
rurales, ante la protesta campesina, “el
planteo jurídico es presentar eso como una resistencia a la autoridad”,
siguió Munné. Eso intentaron hacer con Bordón. El cargo de “asociación ilícita” –añadió el letrado- es un intento de “criminalizar a una
organización de campesinos que logró la sanción de la ley 13.334. No hay
‘resistencia a la autoridad’, cuando la autoridad se aparta de la ley
vigente que prohíbe los desalojos. Bordón defiende a campesinos que otros
abogados no quieren defender”.
“Iba a ser un
atropello a un derecho tan importante como es el de defender los derechos”. Lo planteó Puyol en
el debate, cuando recordó los ataques a los abogados defensores de los derechos
humanos durante la dictadura, asesinados o desaparecidos. “No se puede decir que hay respeto por los derechos si no se pueden
defender”, dijo.
Juan Carlos Tizziani- Rosario12