Un SERVICIO al que conocían como TIPI
Ya son nueve los magistrados que han
dictaminado en la investigación. El juez federal de Santa Fe Reinaldo Rodríguez, los cinco del pleno de
la Cámara Federal de Rosario (Elida
Vidal, Aníbal Pineda, Fernando Barbará, José Guillermo Toledo y Ricardo Moisés
Vásquez) y los tres de la Sala 2 de Casación (Ledesma, Slokar y Yacobucci).
Sólo dos de ellos, Rodríguez y Toledo, coincidieron en exculpar a Ramos, porque
los otros siete se inclinaron por profundizar las investigaciones.
La Cámara de Rosario anuló la "falta de
mérito" de Ramos a pedido del fiscal Martín Suárez Faisal, quien sostuvo
que el juez Rodríguez había hecho un "análisis parcial y recortado"
de las pruebas. La mayoría del tribunal le dio la razón. "Existen elementos de convicción suficientes para concluir que
Ramos participó en el hecho que perjudicó a Solé", dice el voto de la
jueza Vidal. Y mencionó que el imputado
operó como "Personal Civil de Inteligencia (PCI) con el alias de Ademar Rossi desde el 16 de julio de
1976 hasta el 1º de mayo de 1977, en su condición de 'infiltrado' en la
Universidad Nacional del Litoral, "lo
cual es un indicador más de la probable de su intervención en el hecho que se
investiga".
Los testimonios aseguran que el imputado
operó como "Personal Civil de Inteligencia (PCI) con el alias de Ademar Rossi.
Según
la doctora Vidal, la "valoración en
conjunto de la totalidad" de las pruebas "permite inferir que se
ha configurado el ilícito en cuestión" y propuso revocar la falta de
mérito de Ramos. Sus colegas Barbará, Pineda y Vásquez adhirieron al voto y la
sentencia salió por 4 a 1, ante la disidencia de Toledo.
Ayer, la Cámara de Casación confirmó esa
resolución del pleno de la Cámara Federal de Rosario al declarar inadmisible el
recurso de queja que interpuso la defensora oficial Rosana Gambacorta, que asiste a Ramos.
En el primer voto, Ledesma y Slokar
ratificaron que el "criterio" de la sala: rechazar la queja porque la
resolución de la Cámara de Rosario "no reviste la calidad de sentencia
definitiva o equivalente" y tampoco "se advierte la existencia de una
cuestión federal adecuadamente fundada que permita habilitar la competencia de
este cuerpo como tribunal intermedio conforme la doctrina sentada por la Corte
Suprema de Justicia de la Nación".
En consecuencia -plantearon Ledesma y Slokar-, "corresponde declarar inadmisible el recurso"
de la defensa de Ramos.
Yacobussi coincidió con sus colegas, dijo que
el intento del ex agente secreto del Ejército de dar vuelta el fallo de la
Cámara de Rosario era "inadmisible" porque éste "no reviste
calidad de sentencia definitiva o equivalente", pero se inclinó por
imponer las "costas al quejoso", lo que no ocurrió.
Solé denuncia a Ramos desde hace 35 años.
Asegura que "entre fines de 1976 y
principios de 1977" lo trasladaron desde la cárcel de Coronda, donde
estaba detenido, hasta un centro clandestino en la zona norte de la ciudad de
Santa Fe, donde lo interrogaron por su hermano Alberto Solé, que había pasado a
la clandestinidad y desapareció siete meses después, en agosto de 1977. Dijo
que uno de los interrogadores era Ramos.
Juan Carlos
Tizziani-Rosario12